Los impuestos recaudados en España se destinan a financiar diferentes áreas y servicios públicos, como la educación, la sanidad, las pensiones, la seguridad social, la infraestructura y el transporte público, entre otros.
El presupuesto general del Estado se divide en diferentes capítulos y programas que detallan cómo se distribuirán los fondos en cada área.
Por ejemplo, en el año 2021, el Gobierno de España destinó un 18,2% del presupuesto a la educación, un 7,4% a la sanidad, un 4,7% a las pensiones, un 4,4% a la seguridad social y un 4,1% a la defensa, entre otros.
Además, las diferentes comunidades autónomas y ayuntamientos también tienen sus propios presupuestos y se encargan de gestionar y financiar los servicios públicos a nivel regional y local.
En resumen, los impuestos recaudados en España se utilizan para financiar los servicios públicos y el bienestar social de los ciudadanos, así como para mantener y mejorar la infraestructura del país.